Starfield: Shattered Space | Análisis (PC)

(7.5/10) RECOMENDADO

La saga espacial de Bethesda continúa su camino con Starfield: Shattered Space, un contenido descargable que promete expandir el lore del universo original, sumergiendo al jugador en los rincones más oscuros y misteriosos de los Sistemas Colonizados. Este DLC, que toma lugar en el planeta natal de la enigmática Casa Va’ruun, promete respuestas, pero también plantea preguntas inquietantes, mientras arroja luz sobre una facción apenas esbozada en el juego principal. Después de haber jugado esta expansión en su versión para PC, la experiencia que ofrece resulta tanto intrigante como limitada en varios aspectos clave.

Gracias a Bethesda LatinoAmérica por el código para prensa usado en este análisis.

El DLC se centra en la Casa Va’ruun, una facción que, hasta ahora, había permanecido en las sombras. Desde el comienzo, el tono oscuro y místico es evidente, alejándose de las temáticas de exploración más amplias del juego base para enfocarse en un relato mucho más introspectivo. Shattered Space nos lleva a Va’Ruun’Kai, un planeta donde la religión de la Gran Serpiente rige todos los aspectos de la vida. Este enfoque en una única localización le permite a Bethesda desarrollar un entorno con una atmósfera palpable, pero también limita el alcance de la aventura, algo que puede ser un arma de doble filo dependiendo de las expectativas del jugador.

La narrativa de Shattered Space está muy bien trabajada, presentando una mitología profunda que explora las motivaciones de la Casa Va’ruun y su relación con los Sistemas Colonizados. El culto a la Gran Serpiente, una entidad poderosa y omnipresente en la vida de los habitantes de Va’Ruun, se convierte en el núcleo de la trama. La expansión desvela de manera cautivadora la lucha interna entre la lealtad a esta deidad y la libertad, explorando temas como el fanatismo religioso, la independencia y la lucha por el poder. El diseño de los personajes secundarios es una de las fortalezas de este contenido, ya que presentan perspectivas divergentes que agregan capas de complejidad al conflicto central.

Sin embargo, aunque la narrativa logra cautivar, el enfoque en una sola ubicación puede hacer que Shattered Space se sienta restringido en comparación con la vastedad que ofrecía el juego original. Va’Ruun’Kai, aunque rico en detalle y lleno de historia, carece de la variedad de paisajes que hacían de Starfield una experiencia tan expansiva. Aquí, la repetición de entornos puede volverse monótona con el tiempo, especialmente cuando pasas largas horas explorando los misterios del planeta. Es cierto que Bethesda ha hecho un gran esfuerzo por enriquecer el planeta con mazmorras y secretos por descubrir, pero la falta de diversidad en la topografía se vuelve evidente tras varias horas de juego.

En cuanto a la jugabilidad, es aquí donde Shattered Space tropieza más visiblemente. Si bien la historia es sólida y los personajes están bien escritos, las mecánicas del juego permanecen casi inalteradas respecto a lo que vimos en Starfield. Bethesda no ha introducido nuevas dinámicas que mejoren significativamente el sistema de juego. El combate sigue siendo funcional, pero no aporta nada innovador a la experiencia. Las misiones secundarias, aunque entretenidas, no logran desviar la atención del hecho de que no hay adiciones importantes en términos de mecánicas o poderes que refresquen el ciclo de juego. Esto puede dejar a algunos jugadores con un sabor agridulce, especialmente aquellos que esperaban más innovación después de haber invertido decenas de horas en el título original.

En terminos de duración, el DLC Starfield: Shattered Space me ofreció una extensión considerable y satisfactoria al juego base. Las 8 horas que me tomó completarlo me parecieron justas para evitar la sensación de repetición, aunque esto puede variar según el ritmo con el que se aborden las misiones principales y secundarias. Sentí que el contenido logró mantener mi interés a lo largo de toda la narrativa, con un buen equilibrio entre exploración espacial, combates estratégicos y diálogos profundos. Aunque en algunos momentos ciertas misiones me parecieron un poco alargadas de forma artificial, el tiempo invertido se justificó con el desarrollo de la trama y el enriquecimiento del universo de Starfield, sin sentirse como relleno innecesario.

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Una de las mayores críticas que podría dirigirse a Shattered Space es su falta de ambición en términos de jugabilidad. Si bien la expansión destaca por su historia y su ambientación, se siente más como una extensión de la narrativa que como una evolución del juego en sí. Esto resulta especialmente evidente al compararlo con expansiones de títulos anteriores de Bethesda, como Dawnguard o Shivering Isles, que no solo ampliaban el universo narrativo, sino también introducían nuevas mecánicas, lo cual las hacía imprescindibles para los jugadores. En este caso, aunque la trama es intrigante, la jugabilidad no ha recibido el mismo nivel de atención, lo que podría ser una decepción para quienes buscaban una experiencia más robusta.

A pesar de estas limitaciones, Shattered Space tiene momentos de brillantez que no pueden ignorarse. El diseño de las misiones principales es excelente, con una historia que logra mantener el interés del jugador de principio a fin. Las decisiones morales que el jugador debe tomar a lo largo de la trama añaden una capa de profundidad que se agradece, y la rejugabilidad se ve potenciada por las distintas rutas que se pueden tomar según las decisiones del jugador. Esto permite que cada partida sea distinta, algo que sin duda los fanáticos del RPG sabrán valorar.

Otro aspecto destacado es la atmósfera que Bethesda ha conseguido crear en este DLC. Va’Ruun’Kai es un planeta impregnado de misticismo y desesperación, y cada rincón del mismo parece contar una historia. Las auroras boreales eternas que iluminan el cielo, el silencio opresivo en las cavernas donde se esconden los seguidores de la Gran Serpiente, y la sensación constante de estar en el filo de un desastre inminente hacen que la experiencia sea inmersiva y, en ocasiones, escalofriante. Es en este sentido donde Shattered Space realmente brilla: en su capacidad para sumergir al jugador en un mundo completamente ajeno y hacerle sentir parte de él.

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Sin embargo, como mencioné antes, la falta de innovación en la jugabilidad afecta el impacto global del DLC. A pesar de la introducción de nuevas armas y algunas mecánicas adicionales, estas no son suficientes para revitalizar un sistema de juego que ya se sentía algo estancado en Starfield. El combate sigue siendo funcional pero poco inspirador, y las misiones, aunque entretenidas, a menudo dependen demasiado de las fórmulas que ya conocemos.

A pesar de estos defectos, Shattered Space logra su principal objetivo: ampliar el lore del universo de Starfield de manera significativa. La historia de la Casa Va’ruun es apasionante, y la forma en que Bethesda ha tejido este relato en el contexto más amplio de los Sistemas Colonizados es digna de elogio. Aunque no todas las preguntas encuentran respuesta, el DLC abre nuevas posibilidades para futuras expansiones, y deja al jugador con un mayor entendimiento de este universo vasto y complejo.

En resumen, Starfield: Shattered Space es una expansión que tiene mucho que ofrecer en términos de narrativa y atmósfera, pero que se queda corta en lo que respecta a la innovación en la jugabilidad. Para los fanáticos de Starfield que buscan profundizar en el lore y explorar nuevos rincones del universo, este DLC es una adición valiosa, pero para aquellos que esperaban una evolución significativa en las mecánicas del juego, puede resultar una experiencia algo frustrante. Bethesda ha creado una expansión sólida, pero que no alcanza el mismo nivel de innovación que sus mejores trabajos anteriores.

CONCLUSIÓN

Starfield: Shattered Space está disponible en PC a través de Steam y la Microsoft Store, en Xbox Series X|S y Game Pass. Puedes ver el tráiler de lanzamiento a continuación.