(09/10) ALTAMENTE RECOMENDADA
En Anora, Sean Baker nos traslada al corazón de Brooklyn con una historia que mezcla lo cotidiano con lo extraordinario. La película sigue a Ani, una bailarina exótica interpretada con una mezcla de fuerza y vulnerabilidad por Mikey Madison. Desde los primeros minutos, queda claro que Anora no se conforma con narrar una historia. Es una experiencia completa, diseñada para que vivamos los altibajos de sus personajes de manera cruda y honesta.
Ani, o «Anora» como la llaman algunos, vive en un equilibrio precario entre la supervivencia y su sentido de la dignidad. Baker nos introduce en su rutina diaria con un enfoque que es a la vez empático y directo. Las primeras escenas en el club de striptease HQ son un torbellino de luces neón y cuerpos en movimiento, donde la atmósfera es tan envolvente como inquietante. Madison logra transmitir con pequeñas miradas y gestos la complejidad de Ani: una mezcla de astucia, cansancio y un deseo persistente de algo más.
El guion brilla por cómo combina humor y tragedia sin caer en clichés. En una industria que con frecuencia reduce a las mujeres a caricaturas, Ani destaca como un personaje complejo y real. Cuando conoce a Ivan Zakharov, un joven ruso interpretado con una torpeza entrañable por Mark Eydelshteyn, lo que parece una historia de amor transaccional se convierte en algo mucho más complicado. La dinámica entre ellos es impredecible, oscilando entre momentos cómicos y otros profundamente incómodos, mientras exploran temas como el poder, el dinero y las promesas vacías.
La película también destaca por su riqueza visual. Drew Daniels, el director de fotografía, captura el invierno neoyorquino con un ojo que encuentra belleza incluso en lo desolador. Las tomas de Coney Island cubiertas de nieve contrastan con la calidez artificial del club, reflejando la dualidad de la vida de Ani. Cada encuadre tiene un propósito: mostrar tanto la lucha interna de los personajes como su conexión con el entorno.
Quizás lo más impresionante de Anora es cómo aborda temas como el estigma y la explotación sin caer en el sentimentalismo. Ani no es presentada como una víctima indefensa, ni su vida es romantizada. En cambio, Baker la muestra como una mujer que lucha por mantener el control en un mundo que intenta quitárselo. Es una celebración de su resiliencia, pero también una crítica contundente a las estructuras que la oprimen.
Uno de los momentos más memorables ocurre cuando Ani es invitada a la mansión de los padres de Ivan. Lo que comienza como una escena extraña y cómica se transforma rápidamente en un caos absoluto. Baker cambia de tono con una fluidez que podría parecer imposible, pasando de la sátira social al suspense sin perder la coherencia. Esta habilidad para mezclar géneros mantiene a la audiencia en vilo y subraya el carácter impredecible de la vida de Ani.
Mikey Madison es, sin duda, el alma de la película. Su interpretación de Ani es tan auténtica que es difícil imaginar a otra actriz en el papel. Madison logra transmitir la complejidad de un personaje que podría haber sido un simple estereotipo. Ani es fuerte y frágil al mismo tiempo, pragmática pero también soñadora. Es este contraste el que la hace tan fascinante.
Aunque los personajes secundarios no tienen el mismo desarrollo, muchos de ellos aportan capas interesantes al mundo de Ani. Igor, interpretado por Yura Borisov, es un ejemplo perfecto. Su relación con Ani ofrece momentos de conexión emocional que contrastan con el caos que los rodea. Baker nunca permite que estos momentos se sientan demasiado idealizados, manteniendo un pie en la realidad en todo momento.
La película no es perfecta. Su tercer acto, que se adentra en un territorio más convencional de thriller, puede sentirse un poco alargado. Pero incluso aquí, Baker logra introducir elementos que mantienen el interés. La acción tiene un trasfondo moral que la eleva por encima de lo típico, y el cierre, aunque no completamente satisfactorio, se siente auténtico y fiel al tono de la película.
El humor es otro de los puntos fuertes de Anora. Baker utiliza la comedia no solo para aligerar la tensión, sino para destacar las absurdidades de las dinámicas sociales y económicas. Un ejemplo perfecto es la escena del enfrentamiento con los matones enviados por los padres de Ivan, que combina violencia slapstick con una crítica social que deja al espectador pensando.
Más allá de su trama, Anora es una exploración profunda de la identidad y el propósito. Ani no es definida únicamente por su trabajo; es una joven que busca algo más, aunque las circunstancias constantemente se interpongan. Este anhelo es lo que da a la película su sentido de esperanza, incluso en los momentos más oscuros.
En cierto sentido, Anora es la evolución natural del trabajo de Baker. Al igual que en Tangerine y The Florida Project, se centra en personajes marginados, pero aquí lo hace con mayor ambición. La escala es más grande, y las emociones que explora son más complejas. Es un testimonio de su crecimiento como cineasta.
La música y el diseño sonoro también son elementos clave. Desde los beats pulsantes en el club hasta los silencios incómodos en las conversaciones más íntimas, cada detalle sonoro está pensado para sumergirnos en la historia. La banda sonora, que mezcla canciones pop nostálgicas con composiciones originales, añade una capa de emoción que complementa la narrativa visual.
Al final, Anora es tanto un homenaje como una crítica. Celebra la resistencia de sus personajes mientras señala con firmeza las injusticias de un sistema que los margina. Baker no ofrece respuestas fáciles, pero sí invita a reflexionar. Es una película que se queda contigo, desafiándote a mirar más allá de las apariencias y a cuestionar tus propias percepciones.
CONCLUSIÓN
Con Anora, Sean Baker reafirma su talento único. Es una obra que conmueve, provoca y, en última instancia, inspira. Más que una película, es una experiencia que te invita a ver el mundo desde una perspectiva distinta, recordándonos el poder del cine para conectar y transformar.
Anora llega a los cines peruanos el jueves 16 de enero. Puedes ver el tráiler a continuación.