(7/10) RECOMENDABLE
Desde su anuncio, Mighty Morphin’ Power Rangers: Rita’s Rewind prometía ser una experiencia nostálgica que capturara la esencia de los clásicos juegos arcade, mientras aprovechaba el amor por una franquicia que marcó a generaciones. Sin embargo, lo que podría haber sido una carta de amor al género de los beat ‘em up y a los fans de los Power Rangers resulta ser una experiencia que, aunque brillante en algunos momentos, queda atrapada en la monotonía y decisiones de diseño cuestionables.
Gracias a Digital Eclipse por el código para prensa usado en la realización de este este análisis.
En el apartado visual, el juego acierta con una estética retro que parece salida directamente de una máquina arcade de los 90. Los personajes pixelados tienen un encanto particular, y los efectos de “rebobinado”, que simulan un desgaste de VHS, son un toque creativo que agrega carácter. Además, el tema musical de apertura es una poderosa evocación de la serie original, logrando encender la chispa de la nostalgia. Pero lamentablemente, una presentación atractiva no es suficiente para sostener una experiencia jugable que debería brillar por su dinamismo y profundidad.
El diseño de niveles presenta una estructura en episodios que intenta replicar el formato televisivo. Cada nivel sigue un patrón que incluye combates contra hordas de enemigos, una pelea contra un jefe, secciones de disparos con los Dinozords y un enfrentamiento final con el Megazord. Sobre el papel, esto suena prometedor, pero en ejecución, el ritmo se ve entorpecido por una falta de variedad que hace que todo el juego se sienta repetitivo desde los primeros niveles.
Uno de los problemas más evidentes es el combate. Las secciones de beat ‘em up, que deberían ser el corazón del juego, son increíblemente básicas y carecen de la sofisticación vista en otros títulos del género, como TMNT: Shredder’s Revenge. Los Rangers, aunque visualmente distintos, comparten un conjunto de movimientos muy limitado que se agota rápidamente. Sin opciones de personalización, habilidades desbloqueables o mecánicas más profundas, el combate se vuelve mecánico y poco satisfactorio.
Además, la detección de colisiones es inconsistente, lo que a menudo resulta en ataques fallidos que frustran más que desafían. Esto se agrava por la falta de diversidad en los enemigos comunes, los Putties, que no ofrecen ningún reto significativo ni exigen estrategias diferentes. Aunque los enfrentamientos contra jefes son más interesantes visualmente, también sufren de patrones predecibles y mecánicas recicladas que disminuyen su impacto.
El uso de los cristales de tiempo, que rebobinan el escenario para alterar el flujo de los niveles, es una idea creativa que, lamentablemente, se explota en exceso. Aunque inicialmente sorprende, su repetición constante le resta impacto y termina siendo otra mecánica que se siente desaprovechada. Es un ejemplo de cómo el juego presenta buenas ideas pero falla en desarrollarlas de manera significativa.
Las secciones de disparos con los Dinozords son un punto particularmente débil. Visualmente caóticas y mal diseñadas, estas etapas carecen de la claridad necesaria para entender qué está ocurriendo en pantalla. La perspectiva plana y la saturación de efectos visuales dificultan distinguir los elementos clave del escenario, lo que resulta en una experiencia frustrante y poco intuitiva. Estas secciones, que podrían haber sido un homenaje a clásicos como After Burner, terminan sintiéndose como un obstáculo que los jugadores querrán evitar.
Por otro lado, los enfrentamientos con el Megazord prometen grandes momentos, pero su ejecución también deja mucho que desear. Aunque el cambio a una perspectiva en primera persona es interesante, las mecánicas son demasiado simples y repetitivas. La falta de variedad en los ataques y estrategias, sumada a controles imprecisos, convierte estas batallas en un ejercicio de paciencia más que en un clímax emocionante. La ausencia de un verdadero sentido de progresión o recompensa reduce aún más su impacto.
El modo cooperativo local, que podría haber sido un punto fuerte, también falla en destacar. Aunque es divertido compartir la experiencia con un amigo, la falta de diferenciación entre los Rangers y la monotonía del combate hacen que incluso en cooperativo el juego se sienta plano. La ausencia de un modo en línea también es una oportunidad perdida, especialmente en un mercado donde el juego online es un estándar esperado.
En cuanto a la narrativa, el juego sigue una línea argumental sencilla que se siente como un homenaje directo a la serie original. Rita Repulsa vuelve a causar estragos, y los Rangers deben detenerla enfrentándose a sus secuaces. Aunque cumple su función de contextualizar las misiones, la historia carece de momentos memorables o giros interesantes que mantengan al jugador comprometido.
Uno de los aspectos más decepcionantes es cómo el juego no logra capitalizar la riqueza del material de origen. Los Power Rangers tienen una amplia galería de villanos, habilidades y escenarios que podrían haberse traducido en mecánicas de juego emocionantes y variadas. En su lugar, Rita’s Rewind opta por una experiencia genérica que no hace justicia a la franquicia ni a sus fans.
En términos técnicos, el rendimiento del juego es estable, pero eso es lo mínimo que se espera en un título de este calibre. No hay problemas significativos de bugs o caídas de frame rate, pero la falta de pulido en el diseño general de niveles y mecánicas deja una sensación de producto incompleto.
La banda sonora, aunque efectiva en su tema principal, carece de variedad. Las melodías repetitivas durante los niveles contribuyen a la monotonía general del juego, y la ausencia de temas icónicos de la franquicia se siente como una oportunidad perdida.
CONCLUSIÓN
Mighty Morphin’ Power Rangers: Rita’s Rewind es un juego que, a pesar de su potencial y algunos momentos brillantes, no logra destacarse en el abarrotado género de los beat ‘em up. La nostalgia por sí sola no es suficiente para sostener una experiencia que carece de profundidad, variedad y refinamiento. Los fans de los Power Rangers podrían encontrar algo de entretenimiento en los primeros niveles, pero incluso ellos sentirán que el juego no está a la altura de su legado.
Mighty Morphin’ Power Rangers: Rita’s Rewind está disponible en PC a través de Steam, PlayStation 4|5, Xbox One, Xbox Series X|S y en todas las consolas de la familia Nintendo Switch. Puedes ver el tráiler de lanzamiento a continuación.