(7.5/10) RECOMENDADO
Sword Art Online Fractured Daydream es un título que, a primera vista, promete ser una entrada sólida en el universo de Sword Art Online (SAO), especialmente con su enfoque en el multijugador, las mazmorras de 20 jugadores y el formato de hack-and-slash. Este juego desarrollado por Dimps y publicado por Bandai Namco Entertainment, lleva a los jugadores a la celebración del décimo aniversario de la franquicia Gameverse, un universo con su propio canon separado del anime y novelas ligeras.
Gracias a Bandai Namco LatinoAmérica por el código para prensa usado para realizar este análisis.
Uno de los puntos más interesantes de Fractured Daydream es su capacidad para atraer tanto a fanáticos de la franquicia como a nuevos jugadores. Sin embargo, si eres alguien que busca sumergirse en el lore de SAO a través de este juego, te encontrarás con una curva de aprendizaje dura. Aunque el juego incluye referencias a entregas anteriores y a la novela ligera, la trama sigue mayormente el tiempo del anime, lo que puede generar confusión si no se está familiarizado con el vasto trasfondo de la franquicia. A pesar de ello, su historia independiente brinda un cierto nivel de accesibilidad para los novatos, pero aún deja una sensación de desconexión si no has seguido la serie.
El juego comienza con una trama que involucra a Quinella y Kirito, quienes pronto se dan cuenta de que están atrapados en un entorno digital en Alfheim Online (ALO). Lo que inicialmente parece una narración sencilla, se complica a medida que el mundo de Galaxia sufre un fallo y comienza a fusionar diferentes mundos, introduciendo personajes conocidos y nuevos como Fuuka y Neige. Aunque la trama tiene sus momentos intrigantes, el ritmo es lento al principio, con relleno evidente que recuerda la estructura narrativa de juegos como Kingdom Hearts III. La historia realmente despega en la segunda mitad, similar a lo que ocurre en Persona 3, donde los eventos comienzan a tomar forma y las revelaciones inesperadas aparecen.
Desafortunadamente, la duración de la campaña principal deja mucho que desear. Aunque los desarrolladores mencionaron que la historia toma alrededor de 20 horas en completarse, para muchos jugadores esta cifra se infla debido a la necesidad de repetir misiones por las desconexiones en línea o la necesidad de alcanzar la clasificación S. El contenido se estira con misiones repetitivas y mecánicas que no ofrecen mucho incentivo para rejugarlas, haciendo que el modo historia se sienta más como una obligación que una aventura cautivadora.
Uno de los puntos más fuertes de Fractured Daydream es su estilo artístico, que aunque puede parecer anticuado, similar a los juegos de PlayStation 3, termina encajando bien con la estética global del juego. Cada personaje y escenario tiene un toque vibrante y colorido, lo que le otorga personalidad al título. Este enfoque artístico brilla especialmente en las cinemáticas dentro del motor del juego, donde el estilo cobra vida de una manera que incluso podría inspirar un proyecto de animación 3D de SAO (aunque quizás no todos los fanáticos deseen eso).
El diseño de los enemigos, sin embargo, sufre de la reutilización constante de modelos con ligeros ajustes de tamaño y color, lo que trae recuerdos de los antiguos juegos arcade de beat-‘em-up. Aunque los jefes mundiales ofrecen cierta variedad y se sienten como un homenaje a los grandes antagonistas de SAO, la repetitividad de las subclases de enemigos afecta la frescura del combate, volviendo el juego monótono en ciertos momentos.
El multijugador, que es uno de los mayores atractivos del juego, tiene sus altibajos. Si bien es emocionante unirse a otros 19 jugadores para enfrentar mazmorras y jefes, la dependencia constante de estar conectado a los servidores hace que incluso las funciones básicas del juego, como mejorar el equipo, estén bloqueadas si no se tiene acceso en línea. Esto genera frustración, sobre todo cuando las desconexiones obligan a reiniciar misiones completas, perjudicando la experiencia. Además, el juego depende demasiado de la funcionalidad en línea, lo que inevitablemente plantea dudas sobre su longevidad una vez que los servidores se apaguen.
El diseño del entorno en Fractured Daydream es otro aspecto que destaca. Los escenarios están bien diseñados, con una iluminación impresionante y detalles que hacen que cada área se sienta única. Sin embargo, no se puede ignorar que algunos niveles reutilizan texturas de escenarios anteriores, lo que reduce un poco la sensación de novedad. A pesar de ello, los desarrolladores han añadido mecánicas interesantes como paredes rompibles que introducen una capa adicional de estrategia, aunque no siempre son notorias en medio del caos del combate.
En cuanto al sonido, el juego tiene una banda sonora original que, lamentablemente, pasa desapercibida en gran parte debido a la repetitividad de la música de fondo en las sesiones multijugador. El tema principal, «Our Song» de ReoNa, es un acierto, encapsulando el espíritu de celebración del aniversario de SAO. Los efectos de sonido también son efectivos, brindando una sensación de peso a cada ataque, pero la superposición de sonidos en los combates masivos puede volverse abrumadora.
El combate en Fractured Daydream es intuitivo y fácil de aprender, lo que permite a los jugadores disfrutar de las habilidades avanzadas y encadenar combos sin mucho esfuerzo. Sin embargo, el retraso ocasional en la respuesta de los controles, donde los comandos simplemente no registran, puede arruinar combos en momentos cruciales, lo que resulta frustrante, especialmente en misiones difíciles o en enfrentamientos contra jefes.
En resumen, Sword Art Online Fractured Daydream es una experiencia que ofrece destellos de brillantez en su estilo visual, diseño de entorno y potencial multijugador, pero está plagada de problemas técnicos y una historia que no termina de despegar hasta la segunda mitad del juego. Si eres fanático de la franquicia o buscas un RPG de acción multijugador con algunas mecánicas interesantes, vale la pena probarlo. Sin embargo, para los que no están familiarizados con Sword Art Online, es probable que encuentren una experiencia fragmentada que no siempre logra aprovechar su propio potencial.
CONCLUSIÓN
Sword Art Online: Fractured Daydream ofrece una experiencia visual impactante y un combate dinámico que encantará a los fans del anime, pero su narrativa fragmentada y el desequilibrio en las mecánicas de progresión pueden frustrar a quienes busquen una aventura más coherente. A pesar de sus altibajos, el juego logra captar la esencia del universo de SAO, creando momentos memorables de inmersión. En el caos de este mundo roto, hay belleza que disfrutar si puedes soportar las grietas. «Entra en el sueño, pero cuidado: los bordes están afilados.
Sword Art Online: Fractured Daydream está disponible ahora mismo en PC a través de Steam, en PlayStation 5, Xbox Series X|S y todas las consolas de la familia Nintendo Switch. Puedes ver el tráiler a continuación.