Esta semana finalmente llega a los cines el que parecía un proyecto maldito para DC Films, una película cuyo destino era incierto desde su gestación y que inclusive habría provocado el final de un universo cinematográfico, pero que ahora bajo la visión del director Matt Reeves parece haber encontrado el tono correcto para un Batman que mezcla oscuridad y esperanza de una forma que no se había visto antes en el cine. Bienvenidos al análisis sin spoilers de The Batman.
Gracias a Warner Bros. Pictures por invitarnos a la función de prensa.
Como para calmar la angustia más grande de los fanáticos, empecemos hablando de Robert Pattinson, un actor que por mucho tiempo estuvo estigmatizado por una franquicia, pero que habría encontrado en otra la oportunidad de redimirse ante al gran público, y menciono al gran público pues para el sector cinéfilo él ya había demostrado la excelente calidad de actor que es, en cintas como The Lighthouse, Cosmopolis, entre otras. Pero específicamente en The Batman, Pattinson personifica a una versión de Bruce Wayne y Batman que por momentos se confunden y que junto con la dirección de Matt Reeves logra establecer a un héroe vigilante que acepta su legado lleno de oscuridad, pero que es capaz de superar sus traumas para empezar a trabajar junto a quienes él (Batman) considera honestos o con la capacidad de dejar a un lado la necesidad de venganza. Sobre este tema, el guion de Reeves y Peter Craig hace un excelente trabajo desarrollando al personaje que dentro de la película todos llaman «venganza» llevándolo a un nuevo status quo con el que se volverá más que todo en un símbolo de esperanza para toda Gotham City.
Además que este Batman lleve tan solo dos años siendo el vigilante de Gotham, definitivamente dota de un potencial sin precedentes al personaje que permitirá seguir contando historias más oscuras, y esto sin duda es bueno para el futuro de la franquicia, pero lamentablemente para esta primera película podría ser un aspecto negativo, pues por momentos parece que estuviéramos en el clímax de una historia que empezó a contarse mucho antes del inicio de esta. Aún así, tanto Bruce como su alter ego, tienen un desarrollo satisfactorio y demuestra lo acertada que fue la decisión de poner a Robert Pattinson como The Batman.
Tal y como lo adelantaba en el párrafo anterior, Batman no estará solo durante este «largo Halloween» que plantea la película, y al igual que en el cómic que intenta adaptar Matt Reeves y su equipo de escritores, serán parte fundamental al momento de intentar resolver los acertijos que irá planteando la película, y que además involucra a los orígenes de la misma sociedad de Gotham City.
El primero en aparecer es el aún teniente de la policía James Gordon, interpretado por el genial Jeffrey Wright, un actor que carga de un carisma único a esta versión del personaje y cuya actuación hace creíble que Gordon sea uno de los pocos elementos honestos dentro de la fuerza policial de Gotham City. Penosamente no seremos testigos de un verdadero desarrollo del personaje en esta película, pues parece que Matt Reeves se está reservando lo mejor del futuro comisionado para un spin-off que debería llegar pronto para seguir expandiendo el universo alrededor de The Batman.
El otro personaje importante para esta historia, y que por varios momentos servirá para confrontar las motivaciones de Batman, es Selina Kyle, una especia de compañera antagonista que tocará la vida de nuestro protagonista a varios niveles, generando que ambos se desarrollen y aprendan que la venganza no es el camino correcto. Felizmente Selina logra mantenerse gris hasta el desenlace de la historia, dando así una versión más apegada a la de los cómics y que al igual que Gordon, podría llegar a explorarse en su propio spin-off, o en una secuela que para este momento se cae de madura.
Aunque ya haya mencionado a Selina Kyle, tengan por seguro que The Batman aún guarda más de un villano en su arsenal, siendo obviamente el principal The Riddler, interpretado por el multifacético Paul Dano, en una versión del personaje claramente inspirado en el conocido Asesino del Zodiaco, que a su vez se alimenta de cintas como Se7en de David Fincher para volver aún más complejo y completo a este villano que por mucho tiempo fue subestimado inclusive por los lectores. El trabajo de Dano tanto a nivel físico como de voz, llena la película de un aura de terror e incomodidad como no se había experimentado antes las cintas de superhéroes, y aunque la calificación no permitirá ir más allá en lo explicito que podría ser, son las sutilezas de Matt Reeves las que vuelven a The Riddler en el villano más terrorífico y escalofriante del mundo de los superhéroes en el cine.
En cuanto a la familia del crimen de Gotham, integrados esta vez por Carmine Falcone (John Turturro), un villano que parece tener un pasado intrigante, pero que por lo anteriormente dicho, su historia es una de esas que parece desarrollarse mucho antes de The Batman, y The Penguin, encarnado magistralmente por por un irreconocible Colin Farrell, resalta de sobremanera este último por su capacidad para sostener una confrontación con Batman tanto física como intelectual, no hay duda que este es el spin-off que más espero.
Por el lado técnico de la cinta, gracias al detrás de cámara pude confirmar que el equipo de producción se valió en su mayoría de efectos prácticos respetando así la visión realista de Matt Reeves, y continuando con este apartado, en lo que respecta a la fotografía, Greig Fraser realiza un trabajo estupendo con esos atardeceres y crepúsculos que ponen a Batman en una posición en la que el espectador siente que antes y después del anochecer, siempre habrá luz y eso siempre trae esperanza. Adicionalmente hay que resaltar el trabajo de Michael Giacchino en el apartado sonoro, cuyo más grande merito es haber podido crear un tema reconocible para Batman, algo que solo había logrado hacer Danny Elfman en 1989.
En conclusión, The Batman logra adaptar correctamente el aspecto más detectivesco del personaje y gracias a la visión de Matt Reeves tenemos una versión mucho más honesta, oscura y hasta divertida del héroe encapuchado. Y como película de acción con tintes de cine noir, el director consigue elevar el nivel de lo previamente visto en otras producción dentro del género de superhéroes, planteando escenas introspectivas lo suficientemente ágiles como para volver digeribles las casi tres horas que dura esta primera historia que, con un tono «más realista», busca representar situaciones extraídas de películas anteriores pero sobre todo de las más celebres novelas gráficas del personaje poniendo al mismo nivel tanto al héroe como al villano diferenciándose así de anteriores adaptaciones que diluían la figura de Bruce Wayne y Batman en favor del villano de turno. Entonces, no es exagerado decir que estamos antes una versión modernizada y mucho más aterrizada del personaje cuyo potencial de franquicia llena de esperanza a quienes aún buscan aquel blockbuster de autor que logre hacer coincidir la opinión de la críticos con la reacción del fanático. Definitivamente The Batman consigue dar con el punto preciso de como deben ser escritas este tipo de historias, demostrando que aunque la oscuridad inunde el mundo del superhéroe, este siempre se levantará para ser aquel faro de esperanza que todos necesitan para ser mejores.
The Batman está disponible a partir de hoy en todos los cines peruanos.
