(7.5/10) Recomendado
El aclamado estudio Team Ninja nos trae una nueva aventura épica con Rise of the Ronin exclusiva para PlayStation 5, un juego que promete sumergirnos en el Japón del siglo XIX de una manera completamente única. Aunque inicialmente se esperaban similitudes con títulos anteriores del estudio, como Nioh, este juego ofrece una experiencia fresca y distinta, alejándose de los Soulslike y abrazando un enfoque más basado en la acción y la aventura de mundo abierto. Con un contexto histórico detallado y combates emocionantes, Rise of the Ronin promete ser una experiencia inmersiva que cautivará a los jugadores desde el primer momento. Prepárate para enfrentarte a desafíos únicos y explorar un mundo rico en cultura y tradición cuando finalmente el juego llegue a PlayStation 5.
Team Ninja ha tomado un nuevo rumbo con Rise of the Ronin, dejando atrás el género Soulslike para ofrecer una experiencia de acción y aventura que combina lo mejor de Nioh y Ghost of Tsushima. Si bien conserva algunas características familiares, como la personalización del combate, este juego presenta duelos desafiantes en un entorno de mundo abierto más realista. Aunque sigue siendo exigente, Rise of the Ronin ha resultado, en mi opinión, el título más accesible del estudio hasta la fecha.
El ronin de Rise of the Ronin, forjado por el clan Secret Sword, está unido a un compañero, Twin Blade, con el cual comparte misiones hasta que una tragedia los separa. Ambientado en el Japón de 1860, durante la reestructuración política, el juego sigue al protagonista en su búsqueda de venganza tras la pérdida de su compañero y la caída del clan, en un período de cambios tumultuosos. Con una narrativa histórica sin elementos sobrenaturales, la historia se centra en los desafíos políticos y las influencias extranjeras en el país.
La campaña de Rise of the Ronin abarca más de 15 años, reflejando un período de cambios radicales en la historia japonesa durante el fin de la era samurái. Con la apertura del país al mundo y conflictos entre partidarios y detractores, junto con la opresión del shogunato Tokugawa y las luchas entre clanes, el juego ofrece una experiencia didáctica que explora estos eventos históricos de manera cautivadora. Aunque la narrativa presenta una amplia gama de conceptos y personajes, así como vastas opciones de personalización para el protagonista, este se vuelve el elemento más imprescindible dentro de la experiencia general, ya que las decisiones que tomamos parecen tener un impacto limitado o incluso nulo en el curso de la trama.
Explicando lo anterior, el juego presenta situaciones en las que el jugador elige un bando, pero las consecuencias de estas decisiones a menudo parecen tener poco impacto en la narrativa, lo que genera una sensación de irrelevancia en este mundo cuya narrativa pretende ser más profunda de lo que es realmente. Aunque las opciones pueden ofrecer momentos únicos y afectar la dificultad del juego, la historia principal sigue un curso predefinido, con cambios notables influenciados por las elecciones del jugador pero sin alterar drásticamente el flujo histórico. A través de tres capítulos y un epílogo, el jugador experimenta los eventos clave desde la perspectiva del ronin, participando activamente en ellos y tomando decisiones que influyen en el desarrollo de la trama y la interacción con otros personajes.
A pesar del atractivo inicial de la historia y la profundidad de personajes como Ryoma Sakamoto, la trama comienza a salirse de control a tal punto que inclusive el jugador más paciente podría perder el interés rapidamente. Con tres ciudades como escenario principal, Yokohama y Edo, los eventos se cuentan de manera correcto, sin embargo es Kioto estos pueden tornarse confusos justo antes de iniciar el tercer acto, con cambios rápidos y repetitivos que pueden desorientar al jugador. Aunque el sistema de elecciones y consecuencias es contradictorio, refleja la lealtad del jugador como Ronin, quien puede manipular al shogunato y a los rebeldes para sus propios fines. La historia, que fácilmente puede superar las 30 horas, presenta nuevos personajes, grupos y organizaciones en constante cambio, emulando una guerra política tan compleja como una de la vida real.
La estructura de las misiones en Rise of the Ronin sigue un formato relativamente simplificado, similar a las misiones cortas en Nioh, lo que resulta en explicaciones directas y escasos diálogos. Aunque la historia está bien presentada en general, con giros y vueltas abundantes, mantenerse al tanto de todos los eventos puede ser desafiante. El capítulo final puede parecer alargado, pero ofrece una conclusión satisfactoria con momentos narrativos destacados que exploran las relaciones políticas y las traiciones.
Como se ha mencionado varias veces, Rise of the Ronin es el primer juego de mundo abierto de Team Ninja, y aunque en general es una experiencia satisfactoria, no logra salvarse de ciertos errores comunes en el género. Dicho eso, el juego ofrece una variedad de actividades, como misiones principales y secundarias, eventos aleatorios y combate en campos de entrenamiento, sin abrumar al jugador con una cantidad excesiva. El juego se aparta de los géneros soulslike y de la estructura de fases típicos de Team Ninja, ofreciendo una experiencia más accesible. La mecánica de combate, centrada en la habilidad del jugador y el tiempo de respuesta, se ve impulsada por la función de parada, que varía según la postura del arma del personaje y es crucial para el éxito en el combate.
En ese sentido, el sistema de combate en Rise of the Ronin ha resultado ser su apartado mejor logrado, construido sobre la base de Nioh y Wo Long: Fallen Dynasty, este brinda al jugador una amplia gama de armas, cada una con su propio estilo y mecánicas que afectan el combate de manera única. Desde katanas hasta rifles, el jugador puede equipar dos armas de corto alcance y dos de fuego, cada una con hasta tres estilos diferentes que influyen en la jugabilidad. La diversidad de armamento se complementa con cuatro árboles de habilidades que afectan los atributos del personaje y se desarrollan a través de compañeros de guerra, proporcionando una experiencia de combate dinámica y estratégica.
Las mecánicas de combate en Rise of the Ronin también se distingue por su flexibilidad en el uso de las armas y estilos de lucha. Cada arma tiene múltiples estilos que ofrecen ventajas tácticas específicas, lo que permite al jugador adaptarse dinámicamente a diferentes situaciones en el combate. Además, se introduce un sistema de parada que requiere precisión y táctica, permitiendo al jugador reducir la resistencia del enemigo y crear oportunidades para ataques críticos. Este tipo de jugabilidad añade una capa adicional de estrategia al combate, fomentando decisiones tácticas y ofreciendo desafíos tácticos emocionantes contra múltiples oponentes.
Todas estas dinámicas en Rise of the Ronin, como la variedad de estilos de lucha, la amplia gama de armas y el nuevo sistema de paradas, resultan más emocionantes contra jefes y enemigos más poderosos. La ausencia de magia y la dependencia de items consumibles realzan la sensación de impacto en cada golpe, añadiendo un toque de realismo al combate. La dificultad del juego, aunque elevada para el jugador menos experimentado, ofrece un equilibrio entre el desafío y la accesibilidad, con un sistema de karma que recompensa la venganza contra los enemigos que te derrotan y garantiza el progreso incluso para los jugadores menos experimentados, permitiendo una experiencia gratificante en todo momento.
En este punto no hay duda de que Rise of the Ronin ofrece una divertida experiencia de juego en mundo abierto y un gratificante sistema de combate, acompañados de una gran variedad de actividades que enriquecen los elementos antes mencionados. Sin embargo, el sistema de sigilo, crucial en varias secciones del juego, carece de profundidad y desafío, revelando una falta de mejora respecto a los títulos anteriores de Team Ninja. A pesar de esto, las batallas contra enemigos poderosos, especialmente los jefes, destacan por su intensidad y contexto histórico, proporcionando momentos emocionantes y memorables para los jugadores.
Además, Rise of the Ronin usa la cultura y el folklore japones para dar cuerpo a la experiencia jugable. Aunque repite muchos conceptos básicos en este tipo de juegos, si logra destacar en ciertos aspectos, ofreciendo tanto puntos positivos como negativos, estos reflejados en el apartado más técnico, ya que el juego presenta algunos sacrificios debido a su adaptación al mundo abierto, con problemas como demoras en la carga y limitaciones visuales, aunque estos son compensados por la excelente calidad artística. Además, el juego destaca por su representación fiel de la cultura japonesa y su época de cambios, mostrando el talento del Team Ninja para sumergir al jugador en la narrativa y el contexto cultural.
Aunque Team Ninja suele enfocarse en la jugabilidad, es difícil ignorar la falta de calidad visual en Rise of the Ronin, especialmente considerando el tipo de promoción que ha recibido por parte de Sony PlayStation. Los gráficos carecen del estándar esperado para un título «Triple A» de nueva generación, con expresiones faciales, entornos y texturas que parecen salidas de la anterior generación. La dirección de arte, aunque brillante en la representación de los elementos más carácteristicos de la cultura japonesa, no es capaz de unirla a un sistema de mundo abierto, dando al juego un aspecto más genérico y por momentos poco inspirado. Además, las frecuentes caídas de fotogramas y los problemas con la cámara durante el combate podrían frustrar a los jugadores.
Finalmente, y aunque Rise of the Ronin enfrenta desafíos técnicos que limitan su potencial visual, estos problemas podrían ser superados en futuros proyectos si el equipo de desarrollo considerara evolucionar su motor gráfico. A pesar de esto, el juego podría catalogarse como uno de los mejores trabajos de Team Ninja, mostrando un gran cariño en la representación histórica y cultural de Japón. Aunque algunos jugadores quizás no vean colmadas sus expectativas, pueden estar seguros que se encontrarán con una trama interesante y sobretodo un gran sistema de combate.
CONCLUSIÓN
Aunque Rise of the Ronin se ve afectado por una implementación del mundo abierto que no siempre es la mejor, y una narrativa atropellada en su último acto, además de un acabado técnico relativamente desfasado, es su sistema de combate y ambientación japonesa lo que hace difícil calificar a este título como un mal videojuego. Pues los elementos para considerarlo un gran título de samuráis siguen estando presentes, demostrando que Team Ninja sigue siendo excelente en lo que mejor sabe hacer: crear buenos videojuegos de acción.
Rise of the Rōnin está disponible ahora mismo en exclusiva para PlayStation 5. Puedes ver el tráiler de lanzamiento a continuación.